La afición mexicana no pudo resistirse a gritar la expresión homofóbica que Rusia prohibió y ahora la Federación Mexicana de Fútbol podría recibir la octava multa por parte de la Federación Internacional de Fútbol. Se estima que en el estadio asistieron 79 mil 800 aficionados de los cuales, aproximadamente, 40 mil eran mexicanos.
El grito de “Eh P**o” se pudo escuchar desde cualquier parte dentro del estadio. Los reportes de algunos asistentes indican que solo se registró en una ocasión sobre el despeje del portero alemán Manuel Neuer al minuto 24 del partido que ganó México en contra de Alemania en el primer juego del grupo F.
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La FIFA ha multado a México en 7 ocasiones con un monto total aproximado por 2 millones de dólares.
El Tribunal de Arbitraje del Deporte de la FIFA abrió la investigación sobre la conducta de los aficionados mexicanos por considerar al grito homofóbico como un cántico insultante.
Se presume que el grito inició durante la clasificación para las olimpiadas de Atenas 2004 durante el juego entre Estados Unidos y México en el estado de Jalisco. La primera vez que la Federación Internacional hizo un extrañamiento fue en el Mundial de Brasil en 2014 y desde entonces se han desarrollado 7 investigaciones en contra de México que no ha logrado desterrar el cántico de sus porras.
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El grito homofóbico consiste en que la afición insulte al portero contrario o visitante al momento que despeja en un saque de meta. Usualmente se prepara o se hace bulla mientras acomoda el balón, da indicaciones hasta el momento del impacto de la patada para enviar el balón desde la portería hasta la mitad del campo. En el golpe, la afición expresa la palabra homofóbica y así culmina la exclamación que la FIFA trata de evitar.
